Trinidad Gatica e Ignacio Contreras, quienes cursan ingeniería civil matemática y computacional, pudieron interiorizarse del estado del arte de las matemáticas aplicadas en diversas disciplinas como la biología y el estudio del medio ambiente. Además, los representantes del capítulo estudiantil SIAM-PUC lograron generar lazos con múltiples estudiantes e investigadores ligados a las matemáticas aplicadas, experiencia que ahora esperan replicar a nivel local en el Encuentro Nacional de Ingeniería Matemática 2022.
La ciudad de Pittsburgh, en Estados Unidos, fue sede entre el 11 y el 15 de julio de la reunión anual de la Sociedad de Matemáticas Aplicadas e Industriales (SIAM), la asociación profesional y académica más grande del mundo dedicada a las matemáticas aplicadas. El evento -que también contó con eventos paralelos asociados a grupos de trabajo de SIAM que se dedican a matemáticas del planeta Tierra, ciencias de la vida y educación en matemáticas aplicadas- congregó a investigadores, académicos y estudiantes de todo el mundo con un gran objetivo: presentar una mirada amplia del estado del arte en matemáticas aplicadas, ciencia computacional y de datos, además de sus aplicaciones, mediante presentaciones, mini simposios, charlas y otras actividades.
En esa multitud de asistentes, estuvieron presentes dos estudiantes de la UC que fueron testigos del alcance que puede tener este tipo de investigaciones en el mundo real. Ignacio Contreras y Trinidad Gatica, quienes cursan ingeniería civil matemática y computacional, viajaron a Estados Unidos como representantes del capítulo estudiantil SIAM-PUC. Esta organización, cobijada por el Instituto de Ingeniería Matemática y Computacional, es la primera en su tipo en toda Latinoamérica y se preocupa de fomentar la motivación de estudiantes con interés en las matemáticas aplicadas. Dicho trabajo se realiza a través de coloquios, seminarios y cursos de estudiantes para estudiantes con el fin de compartir y aprender sobre diversos temas del área.
“Era la primera vez que la reunión anual se hacía de manera presencial desde el inicio de la pandemia; de hecho, el año pasado se efectuó sólo de manera online”, comenta Ignacio Contreras. El estudiante agrega que la finalidad de la reunión anual realizada en Pittsburgh y sus eventos satélites fue agrupar a todos los miembros de SIAM “para que se encontraran, conversaran e hicieran conexiones entre sí. La idea era volver a juntar la comunidad después de todo lo ocurrido producto de la pandemia”.
Trinidad Gatica e Ignacio Contreras en EE.UU.
Bajo esa perspectiva, lo que vieron en EE.UU. les permitió apreciar el amplio potencial que hoy tienen las matemáticas aplicadas tanto a nivel global como nacional. Trinidad Gatica cuenta que en esta ocasión el foco de las charlas y presentaciones estuvo puesto, principalmente, en el área de machine learning: “De hecho, hubo un día completo dedicado a eso. En general, casi todas las investigaciones eran bien aplicadas y apuntaban hacia el lado de la biología o de la física, con modelamiento de procesos de ambas disciplinas”.
Un ejemplo sumamente práctico, precisa Ignacio Contreras, es el estudio del clima: “Pudimos conocer estudios que apuntaban a modelar el movimiento de las corrientes oceánicas. La idea era establecer un modelo de 1980 hasta 2010 y con esa información establecer lo que iba a pasar entre 2010 y 2020 y también hacia el futuro. Lo que se busca es ocupar esas técnicas para predecir el comportamiento y la evolución del clima a lo largo del tiempo”.
Además, señala, se discutió “mucho modelamiento matemático en ecuaciones diferenciales de procesos biológicos, por ejemplo, en cuanto a movimiento de ciertas células o proteínas. También en lo que se refiere a cómo esas células se organizan o la manera de modelar cuál va a ser su comportamiento en el futuro”. A eso se suman sistemas dinámicos de control: “Un ejemplo es lo presentado por el profesor Pedro Gajardo, de la Universidad Santa María. Él dio una charla sobre cómo modelar los volúmenes óptimos de pesca para que la captura sea viable. Eso podría ayudar a definir políticas públicas y evitar que los pescadores sobreexploten el recurso del cual viven”.
La experiencia de conocer de primera mano estas investigaciones y compartir con sus autores, fue esclarecedora en cuanto al desarrollo académico y profesional de las matemáticas aplicadas. “Una se da cuenta de que todavía hay mucho por aprender. Existen múltiples áreas en las que se puede trabajar y también hay mucha gente involucrada. En Chile, suele ocurrir que las matemáticas aplicadas son vistas como un nicho muy pequeño y donde no participa demasiada gente. Pero en instancias como la de Pittsburgh queda claro que hay personas de todo el mundo que están entrelazadas entre sí y colaborando en temas que son importantes para avanzar en muchas áreas como el medio ambiente, entre muchas otras”, agrega Trinidad Gatica.
La proyección a ENIM 2022
Tras lo vivido en Pittsburgh, el siguiente paso es transmitir esa experiencia a nivel local. El primer escenario para esa fase será el Encuentro Nacional de Ingeniería Matemática 2022 (ENIM), que se realizará entre el 3 y el 5 de agosto en el Campus San Joaquín de la Universidad Católica y que busca reunir a estudiantes de la carrera de ingeniería matemática de todas las universidades de Chile.
“En Estados Unidos, nos dimos cuenta que el ENIM va bastante enfocado hacia lo que se hizo en el Annual Meeting de SIAM. En ENIM, la idea también es generar lazos y mostrar esta dualidad de las matemáticas, que pueden ser puras y además pueden ser aplicadas para modelar cosas que pasan en el día a día y en diferentes áreas”, explica Trinidad Gatica. Lograr que la comunidad se vuelva más cercana entre sí es clave, ya que la sexta edición de este encuentro es la primera que se realiza desde el inicio de la pandemia.
Una de los encuentros entre los asistentes a la reunión anual de SIAM.
“En Pittsburgh, tuvimos la oportunidad de hablar con gente de distintas partes del mundo. Había personas de España, México, China, Estados Unidos, Líbano, Holanda, Suecia y hasta de Nepal. Eso hace que uno abra sus perspectivas. Sí, era gente de diferentes países, pero nos unía el interés en las matemáticas. Yo podía hablar con alguien y era como si lo hubiera conocido toda la vida”, señala Ignacio Contreras. Por eso el estudiante afirma que estas instancias son “lugares increíbles para encontrarse con personas que tienen el mismo pensamiento que nosotros. Tal vez vengamos de distintos lugares, pero nos une algo en común”.
Replicar esa dinámica es, precisamente, lo que se busca en el ENIM, el cual contará con charlas magistrales, cursillos, charlas de ex alumnos y de estudiantes, más una feria del futuro. “Uno de los objetivos de ENIM es que en Chile se generen lazos a nivel local, para que las personas lleguen a investigar en conjunto o establezcan contactos entre sí”, afirma Trinidad Gatica.